TERCERA PARTE
El Sacrificio del Cirujano por la Sociedad
Los cirujanos por obligación, pero con agrado, sacrifican su juventud para alcanzar sus objetivos personales en educación, entrenamiento y alcanzar la competencia profesional. Cuando completan 14 o 20 años de preparación, después del bachillerato, para el cuidado de sus pacientes, han sacrificado la flor de su juventud, tienen más de 40 años, van "cuesta abajo" biológicamente, y usualmente conviven con déficit económico, cultural, emocional y de madurez. Así, que están en gran desventaja comparados con sus pares en otras profesiones.
Entrenamiento Quirúrgico
El entrenamiento en cirugía general o en especialidades nos brinda la oportunidad de ser parte de algo especial: la oportunidad de disciplinar la mente, de aprender cómo pensar, de desarrollar habilidades técnicas, de tomar decisiones clínicas cruciales, de soñar, de ser creativo, de descubrir nuevos conocimientos, de alcanzar un rendimiento personal óptimo y de ganarse el privilegio de tener pacientes que confian su bienestar y su vida en nuestras manos.
Trabaje rápido pero no se apresure, es mejor expresado como opere eficientemente pero no se precipite. La aparente velocidad del procedimiento quirúrgico es directamente proporcional a la competencia, habilidad y eficiencia del cirujano más que a acciones apresuradas o desdeñosas para ahorrar unos pocos minutos. Denton A. Cooley, que en mi opinión es uno de los cirujanos técnicos más finos de la historia, nunca parece apresurarse y sin embargo, como por arte de magia, termina un procedimiento complejo en muy corto tiempo. Esto se debe a que él no pierde tiempo o desaprovecha ningún movimiento, trabaja experta y deliberadamente hacia su objetivo.
Los verdaderos enemigos del cirujano son: la ignorancia y la enfermedad, y la cura primaria para las dos son educación, entrenamiento e investigación.
Jamea C. Thompson en su mensaje presidencial en el ACS en 1983 dijo:
"La medicina de hoy es en gran parte exitosa gracias a la investigación de ayer, y si fallamos hoy en perseguir vigorosamente la investigación, la medicina de mañana será la medicina de hoy".
¿Por qué estoy trabajando todavía a los 71 años?
Porque soy exitoso y feliz haciendo lo que hago. Adicionalmente, no he sido capaz de encontrar o pensar en algo más que prefiera estar haciendo. Además, quisiera pasar el resto de mi vida siendo útil como pueda ser. Esta fue la filosofía fundamental que me inculcaron mis abuelos, mis padres y mi mentor y amigo el Dr. Jonathan Roads y mi heroe el Dr. Benjamin Franklin. Lo mejor de todo es que he sido paciente y completamente apoyado y mejorado en mi vida, por mi esposa y socia, Terry, quien de otra manera tendría que soportarme en la casa.
Dr. Stanley J. Dudrick, MD FACS
Interesante.
ResponderEliminarUn cirujano cubano.
Dr. Andrés
andres760316@gmail.com